sábado, 18 de mayo de 2013

CUENTO PARA NO MORIR



Un pájaro con las alas rotas se posó en la única rama verde del gran y viejo árbol que soy. Y mi corazón de árbol bombea sangre de árbol a esa sola ramita para que el pájaro viva un poco más, un alguito más y retener así a ese ser que, por herido, me da sentido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Deja tu comentario...